Silencio, no hables,
¿No ves que ella duerme?
En su blanca cama,
Llena de claveles.
Deseos de madre,
La niña no duerme,
Con solo quince años,
La llamó la muerte.
Silencio, no hables,
qué no la despiertes,
¿no notas que sueña?
Que belleza tiene...
No pude mirarla,
No pude, comprende,
No estaba dormida,
La llevó la muerte.
Silencio no hables,
¿No ves que se mueve?
¿no ves que entre sueños,
Hasta se estremece?
Que dolor de madre,
Que locura tiene,
La ve sin colores,
Y no lo comprende.
Silencio, no hables,
Que no se la lleven,
Déjenla un poquito,
Que yo la contemple
Quiero recordarla,
Así como duerme,
No quiero pensar,
La llevó la muerte.
Mariangeles
Santo Dios... un poema tan triste... no quiero ni imaginar el dolor... bien se explica el dolor... es una tragedia que nadie debería pasar. Besos ammiga, Eve
ResponderEliminares a la vez tristisimo y bello,ni me imagino tan grande dolor
ResponderEliminarfelicitaciones cielo
un besote
ohhhh q intenso,maravilloso, esa sensibilidad logras trasmitirla
ResponderEliminarmil gracias cielo!
muaks
Muy lindo poema , muy bien expresado cielo. Felicidades
ResponderEliminarA veces la realidad es dura y cuesta aceptarla. Cuando así sucede es mejor pensar que la vida, e incluso la muerte, son sueño.
ResponderEliminarPero nos despertamos y vemos la realidad.
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